Fotografía de S. Lorenzo, autor de la WWW.
Debaixo destas augas o pobo de Alberguería.
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El texto que sigue, aparece en el
diario La Voz de Galicia de hace unos cuantos años (1993), por
su importancia lo reproduzco íntegramente. Lo firma Santi Palmeiro.
Por mi parte no he cambiado ni una
coma, únicamente he puesto las fotografías que creía conveniente. El
artículo traía una fotografía de Louxa que se veía el embalse y un
título "El pueblo de Alberguería quedó bajo las aguas del
pantano de Prada".
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En Alberguería vivían más de 75
familias cuando fue inundado.
Un pueblo bajo el embalse.
O Barco. Santi Palmeiro.
En Alberguería no
volvió a amanecer desde un día del invierno de 1957. Ese año, un río
de escaso caudal que discurría manso a unos quinientos metros, engulló
las casas para siempre. Bajo el embalse de Prada dormitan desde entonces
los restos del que fuera el núcleo más populoso del municipio de A Veiga
y uno de los más grandes de la comarca. De aquel pueblo construido entre
dos arroyos y el río Xares, hoy sólo quedan los recuerdos y un puñado
de personas mayores dispersas por todo el mundo.
Ninguno de ellos ha podido
enseñar a sus hijos la casa que un día les robó el pantano. Al menos 75
familias pasaron por el trance de tener que abandonar sus casas y casi
todo lo que tenían para empezar una nueva vida en otro lugar. Les
quisieron construir un nuevo pueblo en un monte entre A Veiga y Viana,
pero no aceptaron porque pensaron que sería demasiado duro cambiar aquel
valle soleado por la pura sierra alta y rasa.
En la segunda mitad de
los cincuenta, cuando Hidroeléctrica Moncabril -empresa desaparecida-
inició la construcción de la presa, Alberguería era un núcleo
próspero de campesinos y ganaderos, muy unidos. Pero esta unión no les
sirvió para conseguir del gobierno un justo precio por las propiedades
inundadas. Sólo les sirvió para poder llorar juntos cuando la Guardia
Civil les echó por la fuerza ante el inminente peligro de inundación.
De Alberguería solo se salvó la
iglesia, que fue reconstruida a cincuenta kilómetros de allí, en A Veiga
de Cascallá, un pueblo perteneciente al concello de Rubiá, donde está
hoy en día.
No se sabe si en esta operación de
salvamento medió o no Don Eloy, entonces párroco en Alberguería, quien
anteriormente había enseñado con éxito el fútbol a sus convecinos.
EL MEJOR LICOR CAFÉ.
En las cantinas de Alberguería -había tres- se
bebía el mejor licor café de la comarca, cuentan los antiguos
vecinos con nostalgia. Y relatan también como las mujeres iban a
lavar al río la ropa en las cálidas tardes de primavera. Todos
entonarán allí donde estén -como hace Sofía Prada- aquella
canción que rezaba algo así: "Los mozos de Alberguería son
los mejores que en la tierra haya; no hay ni uno solo que lleve la
camisa mal planchada...". Es el recuerdo entrañable y
simpático de un pueblo que lo fue y que ahora permanece vivo, muy
vivo en el corazón de los vecinos. Allá donde estén.
En las escasas fotos que existen del
pueblo, se pueden ver las porterías de madera que el cura había
mandado construir a los niños en un descampado. Allí se jugaba
al fútbol todos los domingos después de la misa. Otros datos,
después de 36 años, van cayendo en el olvido.
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